Día 4: Todo me vale V***a
Tercer día de Sertralina, en la mañana realicé el primer ejercicio de respiración del día, pasé una buena noche pero me siento como en el límbo, como un zombie. Tomé mi ducha, desayuno, Sertralina y salí a trabajar.
Cargo un cuaderno conmigo para anotar cada vez que tengo un pensamiento negativo (venganza, odio, suicidio, etc.). Me causó curiosidad que hoy no me preocupé por vestirme bien, suelo ser una persona muy vanidosa y para mí siempre ha sido muy importante verme bien, relejar una buena imagen ante la sociedad. Tomé lo primero que ví en mi closet y aunque al verme al espejo y sentir que estaba mal vestido, salí como si nada.
Durante el resto del día estuve en clase, parte de mi prestando atención a lo que explicaba el trainer y parte de mí leyendo un foro sobre farándula. No me sentía bien, pero tampoco mal, lo repito, me sentía en el limbo.
Mi apetito no ha cambiado, traje un humectante labial que me va muy bien para la resequedad e irritación de los labios.
Mis pensamientos negativos siguen, al igual que mis pensamientos obsesivos sobre mi ex novio, solo que ya no siento la frustración de antes, como si por fín estuviese aceptando que es así y punto.
Sin más novedades termina mi día, llego a casa, cocino y a dormir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario